El actual gobernador socialista, Óscar Crisóstomo, y el ex militante del Frente Amplio, Ignacio Marín, hoy independiente de izquierda, disputan su paso a la elección final de noviembre.
A pocos días de las elecciones regionales y municipales, la duda que persiste en el entorno político es qué candidatos pasarán a segunda vuelta para el cargo de Gobernador Regional. En la izquierda, el actual gobernador socialista, Óscar Crisóstomo y el ex militante del Frente Amplio, Ignacio Marín, son los candidatos que representan las “dos almas” de dicho sector.
Si bien ambos tienen un estrecho vínculo con el Gobierno, Ignacio Marín fue presidente regional de Revolución Democrática y activo representante de Gabriel Boric en Ñuble durante su campaña presidencial.
En la derecha, por otra parte, el ex seremi de Educación del gobierno del Presidente Piñera, Benjamín Maureira, representa a Chile Vamos, coalición constituida por los partidos tradicionales. Al frente, las alternativas son Jorge Luis Sánchez del Partido Republicano y Cristian Quilodrán, consejero regional en ejercicio.
La ley establece que en la elección a Gobernador Regional, quien resulte electo debe contar con al menos un 40% de los sufragios válidamente emitidos, para resolverse en primera vuelta. De lo contrario, habrá una nueva instancia de votación el próximo 24 de noviembre del 2024.
Cualquiera, menos Crisostomo ni Marín, son casi la misma mierda con diferentes moscas. Victor