A los 17 años el tema de la miel y la apicultura, captó la atención del chillanvejano Patricio Pradenas y de eso ya han pasado 33 años. Fue tras una conversación con un profesor de escuela rural sobre esta materia, lo que desencadenó lo que sería su pasión por la producción de miel y sus derivados. Así es como la empresa Apícola San José, partió con una colmena y hoy ya tiene cerca de 400.
“Primero fue como un como un hobby en la apicultura y desde ahí me enamoré de esta actividad. Después cuando empecé a trabajar un par de años, me di cuenta que era en la apicultura donde me sentía más cómodo y desde el año 2003 me dediqué al 100% como actividad productiva principal, hasta la fecha”, sostuvo Patricio Pradenas.
¿Qué es lo que más le llama la atención de la apicultura?
Lo que más me llama la atención, es trabajar con un ser vivo tan maravilloso como las abejas, porque tanto como forma individual y social, ellas tienen un orden perfecto desde la construcción de la cera, que siempre la hacen igual. Hasta el lenguaje que tienen entre ellas para comunicarse, porque sí se comunican, es perfecto. Trabajar con este ser vivo es maravilloso.
Es casi como que le cambió la vida
-Sí, yo creo que por el hecho de trabajar en la naturaleza, inmersa en ella, me ayuda a relajarme y a tener una parte interna mía que la puedo desarrollar, cuando estoy en el campo.
Un trabajo riguroso y con tiempos
Una colmena, que es como una casa, puede llegar a tener 60 mil ejemplares y en ella hay una sola reina, que es la que pone huevos y genera nuevas abejas, muchas de ellas son obreras, que son las hembras y también están los zánganos que son los machos. Todos tienen tareas y son aplicadas en la ejecución de ella con un orden riguroso que cumplir, para que finalmente se pueda extraer la miel.
Usted considera a las abejas como un ser vivo maravilloso. ¿Trabajar con ellas le ha significado algún cambio en su vida?
-Me he ordenado. Más bien me he tenido que ordenar bastante, en el sentido de ordenar mi negocio, porque cada época del año requiere un trabajo diferente, entonces tengo que ordenarme y tengo un calendario bien estricto en las actividades que se deben hacer y también con los ingresos y costos. (Se ríe como evocando un recuerdo gracioso)
En su mostrador no solo tiene miel, ¿Cómo ha sido diversificar este producto?
-Yo empecé a diversificar el tema de la miel aproximadamente hace unos 8 años atrás. Tal como se ofrecía la miel multifloral, empecé a seleccionar las mieles que producía y sacarle un valor agregado mandándola analizar y obteniendo mieles monoflorales. Así por ejemplo ya tenemos distintas mieles monoflorales como eucaliptus, diente de león, alfalfa chilota, hierba azul, entre otras.
¿Pero cómo saben que esa miel es de una determinada flor?
-Nosotros movemos las colmenas en distintas partes. En regiones y sectores, donde hay flores específicas que florecen en un periodo determinado. La llevamos antes del proceso de florecer, sin miel o con poca miel, y las colmenas juntan esta miel y después la sacamos y la cosechamos. Cuando termina las floraciones, entonces nos aseguramos que esa miel que obtuvo la abeja son de esa flor con algo mucho más técnico, ya que enviamos muestras a la universidad Austral y nos entrega certificada las mieles que son monoflorales.
¿La pandemia, significó un retraso en sus ventas y compromisos económicos?
-Al principio hubo una baja en la venta, pero después se generó un alza en el consumo de la miel y el propóleos, ya que la gente valorizó los beneficios naturales que tiene la miel y el propóleo. De hecho tuvimos un aumento en las ventas de producto ya que ayudó a muchas personas a tener mejores defensas y con eso capear de mejor forma el resfrío y este virus, en este caso.
-Sin duda que esto mejoró la visión que se tiene de la miel…
-Como ejemplo coloco el caso de mi hijo que tiene asma y se resfriaba mucho. Después de comer miel por varios meses y tomar jalea real, con suerte hace un resfrío al año y el cuadro ha disminuido mucho. En mi familia consumimos y es un beneficio que lo hemos notado, entonces lejos de vender un producto que no lo conocemos, nosotros si sabemos los beneficios y lo consumimos y hace un efecto positivo.
-Entonces la miel no es tan solo un alimento, también se puede ver desde el punto de vista médico.
-Una de las mieles más conocidas de Chile es la miel de Ulmo, que se extrae en el sur, preferentemente tiene propiedades antibacteriana que son reconocidas y esas propiedades ayudan a varias complicaciones que uno pueda tener. Eso está más que probado por la Universidad Católica, donde la doctora Gloria Montenegro ha hecho un trabajo extenso de muchos años. Esa es la característica principal de la miel de Ulmo, pero las otras mieles florales también tiene características: por ejemplo la diente de león, que ayuda al sistema gástrico y a que se desinflame los tejidos del organismo, la miel de eucaliptus que tiene propiedades para mejorar el sistema respiratorio y así cada miel monofloral tiene propiedades, entonces para mi la miel chilena es una de las mejores del mundo.
¿Cuál es la fórmula para una miel perfecta?
-Una buena miel bien cosechada no debe superar el 19% de humedad. Entre el 18 al 19%, es lo adecuado, para que se conserven el tiempo. También debemos considerar los tipos de flores endémicas que tiene Chile que no están en otras partes del mundo, como el Ulmo, el avellano chileno y así otras especies florales. Todo esto le dan la calidad a la miel chilena.
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