En prisión preventiva quedó este mediodía Pablo Espinoza Lefende, a quien el fiscal (s) de Chillán, Freddy Benítez Carrero, le pidió dicha medida cautelar por mentirle al tribunal y por ser, a juicio del Ministerio Público, la necesaria para asegurar los fines del procedimiento.
En febrero pasado, el imputado fue formalizado por robo en lugar no habitado y receptación, oportunidad en que la Fiscalía le solicitó al Juzgado de Garantía de Chillán la privación de la libertad en la cárcel, pero éste no la otorgó y lo dejó con arresto domiciliario total.
En la jornada de hoy, el imputado fue reformalizado, con el fin de precisar los hechos en que participó, oportunidad en que el fiscal (s) solicitó que se abra debate sobre la necesidad de cautela. Esto, pues Pablo Espinoza al ser formalizado en febrero pasado dio un domicilio para cumplir su arresto domiciliario total donde no vivía hace dos años, según constató Carabineros al momento de controlarlo. El tribunal, esta vez acogió la solicitud de la Fiscalía y lo dejó en prisión preventiva.
El imputado el 1 de febrero de este año ingresó, junto a otra persona, a robar a un local comercial, desde donde sustrajo diversos artículos y herramientas eléctricas. Además, luego fue detenido por Carabineros con unas baterías de auto que también habían sido robadas de un taller de automóviles.